26 agosto 2011

El CSN no PROCURA ... seguridad


Central nuclear
El pasado 29 de julio, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) anunció que el Pleno del CSN había aprobado, por unanimidad, un informe favorable a la solicitud de renovación de autorización de explotación de las dos unidades de la central nuclear de Ascó (Tarragona) por un periodo adicional de diez años (2011-2021). El permiso de explotación de estas dos centrales acaba el 1 de octubre. El informe del CSN, que NO ES VINCULANTE para el Gobierno, ha sido remitido por el Consejo al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio (MITyC).

Ya comentábamos hace unos días, en un anterior post de este blog, esta decisión del CSN, que demuestra la falta de independencia de este organismo regulador con respecto a la industria nuclear a la que supuestamente regula.

Fukusima cinco meses después

Central nuclear de Fukushima
Después de cinco meses de accidente nuclear, los reactores de Fukusima siguen fuera de control. El Primer Ministro de Japón, Naoto Kan, quiere acabar con la energía nuclear por completo mientras que los ciudadanos, preocupados por la contaminación radiactiva del medio ambiente y de su comida están de su parte. 

Alrededor del 70%  de los japoneses se oponen a la energía nuclear, unas cifras parecidas a las que ofrecen las encuestas en España. Pero la pregunta del millón es si puede Japón funcionar sin energía nuclear, y la respuesta no hace falta que la den sesudos estudios financieros o técnicos. Sí que puede, lo está haciendo ya. Sí sí, has leído bien, a día de hoy solo 17 de los 54 reactores nucleares de Japón están en funcionamiento y el país no ha sufrido el terrible apagón con el que meten miedo los defensores de esta fantasmagórica energía.  

¿Y como han realizado semejante prodigio? Pues actuando con inteligencia. Los japoneses y japonesas han practicado el ahorro energético masivo, solamente con eso han podido mantener cerrados 37 reactores nucleares. Pensaréis que durante este verano, especialmente caluroso en Japón, se estarán achicharrando sin aire acondicionado, pues no, simplemente no lo utilizan como si fuera un frigorífico y programan su termostato a temperaturas normales. Y sus empresas han desistido de las horas extraordinarias fuera de horario (sin que su productividad haya caído), y con un poco de aquí y de allá ahorran luz.

11 agosto 2011

A Repsol le sale barato contaminar la costa de Tarragona

Plataforma petrolifera
El pasado viernes 29 de julio el Consejo de Ministros acordó multar a Repsol YPF con 30.000 € por el vertido en 2010 de unos 180.000 litros de petróleo frente a la costa de Tarragona provenientes de la plataforma de extracción Casablanca, a 43 kilómetros de la costa de Tarragona.

El expediente sancionador concluye que «el vertido tuvo su origen en una concatenación de fallos técnicos de elementos de seguridad y fallos humanos que supone un incumplimiento de las prescripciones de seguridad». Estos hechos demuestran que en la plataforma petrolífera se actuó con desidia y con una falta total de cultura de seguridad y que, además, se incumplieron las normas que la Administración exige a este tipo de industria.

Pero esta resolución también deja en evidencia a los organos públicos; en este caso el asunto ha sido tratado al más alto nivel, en un Consejo de Ministros.

El CSN actúa como si Fukushima no hubiera pasado

CentraL nuclear
La decisión del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) de autorizar la prorroga del funcionamiento de la central nuclear de Ascó, es precipitada, aventurada, dependiente y, sobre todo, no vinculante.
Aunque el CSN autorice su funcionamiento 10 años más, el 1 de octubre, el Gobierno debe y puede denegar la renovación del permiso de funcionamiento de la central nuclear de Ascó, en Tarragona.

Es precipitada porque el CSN puede esperar a tener los informes encargados por la Comisión europea sobre las pruebas de resistencia a los reactores nucleares europeos, ya que según anunció la propia presidenta del CSN, Carmen Martínez Ten, en la I Conferencia Reguladora de Seguridad Nuclear en Europa, las autoridades reguladoras nucleares deben remitir antes del 15 de septiembre "un informe preliminar" a la Comisión Europea sobre los "primeros resultados" de las pruebas de resistencia a los reactores nucleares en los Estados miembros y su informe "completo" antes del próximo 31 de octubre.

Ratificamos la contaminación de Palomares

Tal como muestran las mediciones del propio Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT), Palomares presenta zonas contaminadas desde la superficie hasta unos 6 metros de profundidad en algunas zonas. Las declaraciones del Sr. Director del CIEMAT en el sentido de que no hay contaminación superficial causan dejan atónitos a los miembros de esta organización y a la población en general.

Desde Ecologistas en Acción, manifestamos rotundamente por segunda vez en pocos meses, que las declaraciones del Profesor López, Director General del CIEMAT causan sorpresa y desorientan a la opinión pública. No se puede decir, como lo hace él en recientes declaraciones a la Agencia Europa Press, que en Palomares no haya contaminación en superficie, pues al hacerlo está negando el contenido de los informes técnicos del propio CIEMAT. Pero, además, estas declaraciones del Profesor López causan confusión entre la población y los ciudadanos tanto de Palomares como de España. En fechas recientes todos los participantes de una delegación hispano-norteamericana, de la que formó parte el Profesor López, calzaron botas de plástico para evitar precisamente que la contaminación en superficie les pudiese afectar sus zapatos y las partes bajas de sus vestimentas, como muestran las fotos publicadas por la prensa nacional y extranjera.

Compromisos millonarios con dos promotoras de campos de golf

El Canal de Isabel II adquiere compromisos millonarios, en plena crisis, para construir las infraestructuras necesarias que permitan a los campos de golf, gestionados por las empresa Moraleja Golf SA y La Pradera del Rincón SA, regar sus instalaciones. El importe de las obras podría oscilar entre ocho y diecisiete millones de euros. Ecologistas en Acción considera inaceptable la política de despilfarro de dinero público que el Gobierno regional viene haciendo para favorecer una actividad deportiva privada que carece de interés social.

Uno de los aspectos más controvertidos de los campos de golf es el elevado consumo de agua que requiere el mantenimiento de sus extensas praderas de césped. Para aparentar reducir este impacto, en los últimos años, los promotores de campos de golf se comprometen a regar con agua regenerada procedente de depuradora. El problema es que los costes de construcción de las infraestructuras que permiten alcanzar los niveles de calidad exigidos para el riego, así como su posterior gestión, son muy elevados. Para minimizar el impacto que esta inversión pudiera tener sobre las arcas de las empresas privadas, el Canal de Isabel II desembolsa la totalidad del importe de la construcción que posteriormente repercute a las empresas privadas, mediante el cobro de facturas bimensuales a plazos de hasta 20 años u otros sistemas.

La movilización frena el cultivo de arroz transgénico con genes humanos

Arroz transgenico
La Generalitat Valenciana ha denegado la autorización a la farmacéutica italiana Transactiva para experimentar con cultivos de arroz transgénico con genes humanos en Vinaròs, Castellón, según [1]. Tras una intensa movilización de organizaciones sociales, ecologistas y campesinas [2], el Comité Valenciano de Organismos Modificados Genéticamente, dependiente de la Conselleria de Agricultura, ha rechazado este peligroso cultivo.

El objetivo de este arroz transgénico es obtener enzimas para el tratamiento de la enfermedad de Gaucher. Sin embargo, existen ya varios tratamientos para esta enfermedad que se obtienen a partir de ingeniería genética dentro de ambientes confinados en laboratorio, lo que convertía este experimento es claramente innecesario y con fines puramente comerciales. Los riesgos de este tipo de experimentación son demasiado elevados, y son ya varios los casos de contaminación de la cadena alimentaria por transgénicos experimentales, algunos de ellos con cultivos también de arroz [3].